Síntomas | Detección

Visión borrosa o nublada, indolora.

Mayor dificultad para ver de noche o con poca luz.

Sensibilidad a la luz y al resplandor

Presencia de halos alrededor de las luces.

Colores desvanecidos o amarillentos

La necesidad de usar una luz más clara para la lectura y otras actividades. 

Doble visión en un ojo.

Tratamiento

El único tratamiento es quirúrgico.

La técnica más moderna es la Facoemulsificación, que consiste en la fragmentación del cristalino opaco mediante ultrasonido y luego aspirado, a través de una pequeña incisión de 3 milímetros que no requiere sutura.  El cristalino es reemplazado por una lente intaocular (LIO) plegable, que se coloca en el mismo sitio que este y a través de la misma pequeña incisión, permitiendo así, en la mayoría de los casos, la recuperación de la visión perdida.  

Es una cirugía que se realiza con anestesia tópica con gotas y sedación, todo con la presencia y atención de un médico anestesiólogo. Es ambulatoria, por lo que el paciente vuelve a su casa después de la cirugía.

La cirugía de la catarata mediante ultrasonido (facoemulsificación) es hoy una técnica rápida, segura y eficaz, con bajas complicaciones, que aporta grandes beneficios al paciente, mejorando significativamente su calidad de vida. Tiene un breve período de recuperación y el paciente logra regresar a sus actividades habituales en un corto tiempo

Ventajas de la Facoemulsificación:

• Rápida recuperación visual
• Mínima incisión
• Alta seguridad
• Anestesia tópica
• Rápido reintegro a las tareas habituales

Hasta hace unos años se afirmaba que se debía esperar a que la catarata “madure” para ser operada. Actualmente, con la técnica de facoemulsificación, se sabe que cuanto antes se realice la cirugía, una vez diagnosticada la catarata, menos compleja es y se obtiene mejor resultado quirúrgico.

Cirugía Faco-Refractiva

Los pacientes que tienen cataratas y que además poseen miopía, hipermetropía o astigmatismo tienen la ventaja adicional de poder corregir dichos vicios de refracción al reemplazar el cristalino por una lente intraocular que los compense.

La corrección puede lograrse colocando lentes intraoculares plegables esféricas, asféricas o tóricas. En los pacientes que tengan astigmatismo, además de las lentes tóricas se les puede realizar láser eximer para su corrección.

Para la corrección de la presbicia, además de la técnica de monovisión quirúrgica, se puede colocar lentes intraoculares multifocales, que le permiten tener una adecuada visión para lejos, intermedia y cerca.

Las lentes intraoculares multifocales han significado una revolución, tanto en el campo de la cirugía de la catarata como de la cirugía refractiva, permitiendo corregir no sólo la visión lejana sino también la visión cercana (35 a 45 cm) y la visión intermedia (50 a70 cm).

Las lentes multifocales representan una nueva generación de implantes intraoculares, que nos otorgan independencia del uso de anteojos para la mayoría de las actividades cotidiana al compensar los efectos ópticos tanto para la visión de cerca como de lejos. El tiempo de adaptación varía en cada persona, siendo mucho más rápido una vez que se hayan operado ambos ojos. Los primeros días los pacientes ya logran tener una buena visión, alcanzando la visión óptima al mes de la cirugía.

Muchos pacientes son excelentes candidatos para utilizar estas nuevas lentes, tanto miopes como hipermétropes mayores de 50 años, por lo que pueden beneficiarse todos los pacientes que posean catarata y no deseen usar más anteojos. Sin embargo, se requiere poseer ciertas condiciones o requisitos para poder disfrutar de ellos plenamente. Por ello, es imprescindible concurrir a la consulta y realizarse todos los estudios indicados.